Marc Fumaroli es un pensador francés que dice cosas muy interesantes. Extracto una entrevista del Babelia del 11 de julio:
Fumaroli: Desde Homero hasta Joyce, desde Platón y Aristóteles hasta San Agustín y Santo Tomás, todos estos pensadores nos permiten mirar el mundo en que vivimos con distancia, con una mirada crítica, y no quedar encerrados en nuestras .ilusiones. Hay toda una corriente ciega que sostiene que el mundo moderno se ha desarrollado gracias al egoísmo. Hay que buscar por otros lados, convencernos de que el camino que hemos tomado no es el bueno.P. ¿Cuándo perdimos el camino correcto?
Fumaroli: Lo perdimos con la filosofía anglosajona del siglo XVIII, con Locke y Adam Smith, entre otros. En el fondo, el mundo de ahora es el mundo del todos contra todos, en el que han desaparecido todos los referentes de verdadera grandeza, en el que la admiración, la emulación o la educación es imposible.
La culpa va a ser la ideología que sostuvo el imperio colonial inglés, esa tan aplaudida "revolución industrial" fue una guerra colonial económica que sentó las bases de esta sociedad en la que estamos sumidos: money y solo eso makes the world go round y para ese fin todos los medios son válidos. Eso que llaman en las empresas "objetivos" sean cuales sean los "daños colaterales".
Cada uno debe aprender por sí mismo. Los jóvenes no poseen nada que les haya sido transmitido por las generaciones precedentes y ellos no transmitirán nada a los que les vendrán después.
Terrible afirmación, ¿no? Por eso mi sueño es hacer un colegio, un centro de enseñanza, un lugar donde formarse y crecer espiritualmente.
P. En su último libro publicado en Francia, París-New York et retour, compara la cultura americana y la europea.
R. No tanto la cultura en el sentido universal como la imagen. Considero que la imagen y por tanto la imaginación se encuentran en la base del conocimiento humano. Así que me pregunté dónde se encuentran las imágenes contemporáneas y las he estudiado a la luz del pasado. Y me he dado cuenta de que estamos sumidos en un régimen de imágenes, en principio, feas, sin futuro, de una materia pobre, digital, que se emiten en pantallas, que son efímeras. Y están por todos lados, nos asaltan desde que nos levantamos de la cama. Y esto condiciona nuestra imaginación, la constriñe.
Y yo me pregunto: En la Edad Media no había imágenes, solo en algunas iglesias. Rodeado solo de la realidad ¿tenía el hombre medieval más imaginación?
prosigue la entrevista:
P. Así que somos más pobres en cuanto a imágenes que en el siglo XVII, por ejemplo.
R. Efectivamente, porque las de ahora son imágenes industriales que ejercen una presión irresistible. Yo soy un apasionado del arte. Y creo que las imágenes comerciales que nos invaden, y sus hermanas gemelas, las que están en las galerías de lo que se denomina "arte contemporáneo", no son en realidad arte: son mero producto de la técnica y del mercado. Imágenes artísticas hay muy pocas. Antes, tenían el poder de educar los sentidos y la sensibilidad. Y eran, cómo decir, más nutritivas desde el punto de vista artístico que el océano en el que nosotros estamos sumergidos.
De nuev0 se plantea Qué es arte?, está de moda.
P. Usted ha acuñado el término cultura pizza. ¿Qué significa?
R. Responde a la idea de que no ya no hay tradición nacional, tradición local, de que todo debe ser mestizo, un collage, una instalación, un vídeo, de que todo debe ser una mezcla, de que todo debe ser kitsch. La alta cultura, a lo largo de los siglos, ha estado unida a la tierra, al aire, a la misma luz de un lugar que permanece. El hombre necesita una cultura para adaptarse a la naturaleza. En un mundo completamente técnico como el nuestro nuestra relación con la naturaleza casi ha desaparecido.
No puedo estar más de acuerdo. Pero no creo yo que esto sea casual, o accidental. Al contrario. Todo gira entorno a generar dinero. Contemplar la belleza de la naturaleza es gratis. Pero la publicidad suele incidir en la necesidad de ir a otro lugar para contemplarla. Adjunto imágenes de la sierra de Madrid donde suelo ir a ver la puesta de sol y la salida de la luna. en el pack vienen gratis todas las estrellas.
file:///C:/Users/Pilar/AppData/Roaming/Microsoft/Internet%20Explorer/Quick%20Launch/Launch%20Internet%20Explorer%20Browser.lnk
P. Es usted muy pesimista
R. No. No soy pesimista, porque los pesimistas creen que la humanidad está completamente corrompida y que avanza hacia la autodestrucción. Yo no creo eso: la humanidad tiene un fondo tan excelente como desastroso. Pero ese fondo excelente tropieza con la megalomanía, la ambición desmesurada o, simplemente, con la maldad egoísta. Entre esas dos fuerzas se libra siempre un combate. Y los pocos que tienen algo noble dentro de ellos, lejos de desesperarse, se esfuerzan en compensar esa pulsión autodestructiva de la otra parte. Esa lucha está representada en esas dos parejas de personajes alegóricos, una de Rabelais y la otra de Cervantes: Pantagruel es un gigante generoso y Panurge es un tipo egoísta, avaro, vengativo, mezquino y tramposo. No se puede entender la humanidad sin esos dos polos opuestos.
Sólo en el paraíso o en la utopía uno encontraría un mundo poblado sólo de pantagrueles. La otra pareja, claro, es Don Quijote, ese idealista español, esa suerte de Cristo caballeresco, y Sancho, presa de sus pequeñas ambiciones. La diferencia entre las dos parejas es que mientras Pantagruel y Panurge son completamente antitéticos, Don Quijote y Sancho no lo son del todo. Sancho tiene un lado muy simpático y, además, el sentido común que le falta a Don Quijote. Cervantes es relativamente más filantrópico que yo. Yo estoy más cerca de Rabelais y de Swift. -
París-New York et retour. Voyage dans les arts et les images. Marc Fumaroli. Fayard. París, 2009. 638 páginas. Acantilado lo publicará en 2010 (París-Nueva York, ida y vuelta. Viaje a través de las artes y las imágenes), así como La diplomacia del espíritu y La república de las letras. Su último libro editado en España es Las abejas y las arañas: la querella entre los antiguos y los modernos (traducción de Caridad Martínez, Acantilado, 2008).