El drama del fraude electoral en España
¡ES QUE LO COMETEN LOS MAGISTRADOS!
Por Pilar Baselga
¿Debe el testigo de un asesinato decir que ha presenciado un
presunto delito? No. El testigo llama asesino al que ha cometido el delito ante
sus propios ojos, el que debe utilizar el adjetivo presunto es el que narra el
hecho acontecido, no el testigo.
Pues bien. Yo he sido testigo de cómo los magistrados de
tres Juntas Electorales Provinciales han cometido fraude electoral en Madrid el
14 de noviembre de 2019, en San Sebastián el 17 de julio de 2020 y en La Coruña
el 20 de julio de 2019, y con la aquiescencia de los representantes de los
partidos políticos TODOS. Y por eso lo denuncié en la Policía Nacional (Madrid
y La Coruña) y en el Juzgado de Guardia (San Sebastián).
El 99% de los españoles ignora lo que es el escrutinio
general, un concepto tabú que jamás mencionan los periodistas y aún menos
los políticos. Unos porque lo desconocen, y otros porque quieren que siga
siendo desconocido. Todo el mundo confunde el escrutinio general del tercer día
después de las votaciones con el escrutinio de las mesas electorales el día de
las votaciones. Que no elecciones, puesto que no elegimos a nadie.
Para que quede claro desde el inicio: el escrutinio general consiste
en sumar todas las actas de todas las mesas de toda la provincia, y debe
hacerse, por ley, MANUALMENTE y en un acto público, tres días después de
las elecciones en las 52 Juntas Electorales Provinciales, sitas generalmente en
los juzgados de las capitales provinciales. Los que presiden y dirigen este
importantísimo acto son MAGISTRADOS Y LETRADOS de los juzgados provinciales,
que cobran por ello un extra de 3700 € por el proceso electoral. Es decir, que
cobran casi 4000 € para cometer un fraude electoral. Manda huevos. Les pagamos
para que nos roben la soberanía nacional.
Según reconoció el mismo magistrado de la Junta Electoral
Provincial de Sevilla en el expediente 334/26 “En España no se realiza el escrutinio general tal y como manda
la LOREG desde al menos el año 2000, y, en su lugar, se realiza un procedimiento
abreviado porque ningún partido político lo ha exigido”. Blanco y en
botella. Y ¿en qué consiste el “procedimiento abreviado”? Pues simplemente, que
no se suman todas las actas sino que se sacan las actas que están en discusión
y, a las dos horas, se declara que los resultados provisionales, dados el día de
las votaciones por el sistema informático de Indra o Scytl, son los resultados
definitivos. Y así llevamos “desde al menos el año 2000”.
¡No puede ser! Pues
sí, no sólo puede ser. Es.
Numerosos miembros de la Plataforma Elecciones Transparentes
hemos sido testigos del fraude del escrutinio general en varias decenas de Juntas
electorales Provinciales. Hacen un
teatrillo, sacan unas cuantas actas que son reclamadas por los partidos y,
después de un par de horas de llevar y traer cajas, cotejar unas cuantas actas,
declaran terminado el escrutinio general. En Madrid, el teatrillo fue
diferente: consistió en poner a 100 funcionarios (que, a pesar de estar
cobrando su sueldo, también cobran un extra por participar en el fraude
electoral) a cotejar en mesas, y con una regla, el acta de la mesa con el acta
del sistema informático del “Ministerio del Interior/Indra”. Una vez cotejado
que los datos de Indra son los que figuraban en el acta de la mesa, todos se
quedaron contentos, firmaron las actas de escrutinio y de sesión, y se fueron a
casa encantados.
Y ¿dónde está el fraude? En el sistema informático. Indra
lleva desde al menos los años 90, perfeccionando su especialidad, la “gestión
del voto”. Señores, el voto no se gestiona. Basta con sumarlo. No necesitamos
ni sistemas informáticos ni reglas, sino calculadores. Y público, para obligar
a todos estos corruptos a respetar la ley.
Porque, aunque los datos mostrados por el Ministerio del
Interior/Indra sean correctos, nadie puede garantizar que la suma que da la maquinita
sea la correcta.
Y por eso, Indra
avisó de que sólo se hacía responsable de los datos provisionales. Así
lo comunicaba a través Vox Populi:
“Los resultados
de la noche electoral "no son vinculantes de cara a la
proclamación de electos, tarea que es realizada por las Juntas Electorales, con
base a las copias originales de las actas de escrutinio".
(Muy mal escrito, por cierto. Se debería decir "basado en" o "con base en" y tampoco son "copias originales" porque, o son copias, o son originales. Quisieron decir "basándose en las actas de escrutinio originales de las mesas electorales)
Es decir, que Indra demuestra conocer perfectamente la ley
electoral, de que es en las Juntas Electorales provinciales donde se conforman los resultados definitivos, e intentaba cubrirse de la acusación de fraude. Porque, en realidad,
tenía razón: Los responsables del fraude no es Indra o Scytl, sino los que dan por
definitivos y válidos unos resultados provisionales,
provistos el día de las votaciones. Y estos responsables son
LOS MAGISTRADOS DE
LAS JUNTAS ELECTORALES PROVINCIALES
CON EL
CONSENTIMIENTO DE TODOS LOS PARTIDOS POLÍTICOS ALLÍ PRESENTES.
¿Hasta cuándo vamos a tolerar semejante farsa?
¿Hasta cuándo vamos a permitir que nos engañen y nos roben
nuestra soberanía nacional con la colaboración de TODOS LOS PARTIDOS POLÍTICOS?
La única solución es asistir al acto público del escrutinio
general, y exigir que se cumpla la ley.
Ya tenemos cita el próximo 17 de febrero de 2021 en las
Juntas electorales Provinciales de Barcelona, Tarragona, Lérida y Gerona.
¡No permitas que te roben tu voto!
Si no la haces tú, nadie lo hará por ti.
¡Nos vemos allí!
A por ellos EO!!!
ResponderEliminarLamentablemente, no creo que haya a día de hoy ningunas elecciones no amañadas por el poder...Nada se puede dejar al azar...Hay demasiado en juego señores...
ResponderEliminarGente, tenemos que ir a las Juntas electorales . Allí está el tomate.
ResponderEliminarYo lo llevo denunciando desde 2004
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